Publicado el 19 Agosto 2009 a las 18:52
¿Recuerdan a José, a la vecina del 407 y al abuelo Carlos? Ellos eran los protagonistas de mi primer artículo y aprovecho de volverlos a mencionar para clarificar el objetivo de este blog, el cual he llamado “@ccede”.
Pues ellos y todos nosotros necesitamos acceder a este mundo tan cambiante, tan tecnológico, tan técnico, pero el @cceso no se concretará a través de una teoría interminable o de definiciones no entendibles, lo que pretendo -humildemente- es tratar de ayudar, de aterrizar este tema que a veces parece tan distante, pues si bien mi blog aparece bajo la etiqueta de tecnología, está orientado a su aplicabilidad en lo social, a la cultura del internauta, de que ella sea el puente para que usted consiga clientes por Internet, incursione en el comercio electrónico o se comunique de igual a igual con sus nietos, tan simple como eso.
Comenzaré por definir un término que he mencionado en varios artículos: La Sociedad de la Información. Entre una multitud de definiciones he seleccionado la que, a mi parecer, grafica lo que como personas queremos y buscamos.
“Es un estado de desarrollo en que se encuentran las sociedades donde se implanta y generaliza el uso de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones en los distintos ámbitos de la vida de los ciudadanos, de las empresas y las instituciones, y que se caracteriza por la capacidad de obtener y compartir cualquier información, instantáneamente, desde cualquier lugar y en la forma en que se prefiera”.
Existe un modelo para medir el nivel de la Sociedad de la Información y es el utilizado por la empresa Telefónica, que se compone de cuatro pilares de estudio: 1) Entorno, 2)Usuarios, 3)Infraestructura y 4)Contenidos. Se podría, a partir de esta base, idear un esquema para evaluar a nuestra región, en cuanto a nivel de acceso, conectividad, brechas digitales existentes, alcance y dimensiones del turismo en internet, municipalidades conectadas, colegios conectados, entre otros. Estamos en una región donde hay varias comunas con WIFI gratis, ya se ha comenzado a tratar el tema de la conectividad rural, entonces, es necesario preocuparnos a nivel de autoridades.
Nuestra región, ¿Está inserta en esta Sociedad de la Información? Claro, pero ¿Cuál es su nivel? Localmente desconozco si existen estudios acerca de la realidad en la cual estamos, ¿Son necesarios? Absolutamente, ya que lo que no se mide no es susceptible de mejora. El poder acceder a la información de manera prácticamente ilimitada produce transformaciones en la sociedad, en la forma de trabajar y en cómo relacionarse. En general, permite un desarrollo homogéneo, un fortalecimiento empresarial y una educación equitativa, veamos algunos ejemplos: Si un escolar no tiene acceso a Internet, ¿Se encuentra en iguales condiciones a uno que si tiene?, una empresa que no utiliza internet para hacer negocios o difundirse, ¿Está en iguales condiciones a una que lo utiliza?
Para ello propongo la creación de una “Unidad Coordinadora de la sociedad de la información” (U.C.S.I.), ya sea comunal o regional, en donde interactúen distintos sectores de la comunidad: los ciudadanos, municipios, salud, educación, empresas e instituciones del gobierno. Por ejemplo, que esté integrada por el presidente de la junta de vecinos, el presidente de la cámara de comercio, el alcalde, el presidente de la junta de padres y apoderados, el presidente de los centros de alumnos, por mencionar algunos.
Esta unidad coordinadora será la encargada de analizar la situación local y consolidar el tránsito hacia una “Sociedad de la Información” para todos. De hecho, la declaración de principios de la Cumbre de la Sociedad de la Información realizada en Ginebra (Suiza) en 2003 señala lo siguiente: “Debe estar centrada en la persona, integradora y orientada al desarrollo, en que todos puedan crear, consultar, utilizar y compartir la información y el conocimiento, para que las personas, las comunidades y los pueblos puedan emplear plenamente sus posibilidades en la promoción de su desarrollo sostenible y en la mejora de su calidad de vida, sobre la base de los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas”.
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